2.04.2010

Un Febrero

Tener la idea de lo que te toca los nervios te causa cierta reacción. Se empieza a divagar y creer que siempre te encuentras en medio de eso... lo miras, lo hueles, lo tocas, lo sudas... lo sudas en la misma variedad que las emociones te lo permitan.
Aquí estoy mirando, tocando, oliendo y transpirando a eso que le dicen amor; lo hago en la misma locura que el minuto me provoca, en la misma línea de mi cómplice, no soñando... aquí probándolo, cuando sabe tan bien.

2 comentarios:

  1. Ten cuidado porque después tiene unos oleres putrefactos y sabores a suicidio.

    ¡Un saludo y éxito con el nuevo veneno!

    ResponderEliminar
  2. Creo que eso es más que normal... pero muchas gracias :)

    ResponderEliminar